La tierra evoluciona día a día. Nosotros como seres humanos nos preparamos para recibir estos cambios. Conservando buena salud física, mental y emocional. De esta forma, la armonía reinará entre todos los hombres y la Tierra se convertirá en un lugar realmente próspero.
Demos gracias diariamente a nuestro amado planeta tierra, que nos sostiene con alimentos, vestidos, hogar. Y a nuestro gran sol que nos bendice con su luz. Sin ellos dos (la madre tierra y el padre sol), no tendríamos vida. Les enviamos todo nuestro amor y gratiitud.
GAIA es la tierra, la llamamos “Madre Tierra”, pero en esta nueva era es mejor llamarla “GAIA”.
HONREMOS A GAIASu espíritu vive en cada partícula de la tierra, de todo lo que vive y existe. Todo contiene la información de GAIA, porque es nuestra gran madre que nos sostiene. Llevamos en el ADN humano su información y ella lleva en su ADN angelical nuestra información.
HEMOS DE VIVIR EN ARMONIA CON LA NATURALEZAGAIA es una energía sagrada y adorada por todos los demás planetas que existen en el universo, GAIA es una entidad de luz sagrada.
Lo que tú haces e irradias a GAIA, ella lo siente y lo sabe.
Respetemos y honremos a nuestra madre, nuestra Madre Tierra, a GAIA.
GAIA te amo, GAIA te honro.
Estás en la amada Tierra para atender a tu propia evolución. Quizás en este momento estés viviendo insatisfecho, con problemas. Quizás en tu interior hay un vacío, un malestar…
Te invito a sanar y a crecer a través del camino Reiki.
Estamos en la era de la espiritualidad. Y el Reiki es profundamente espiritual.
Como ejemplo, imaginemos un vaso de agua salada en el que poco a poco vas vertiendo agua limpia. Al seguir este proceso, el agua se purificará y terminarás por conseguir un vaso de agua cada vez más pura. Esto es lo que sucederá en tu interior si practicas el crecimiento personal.
Convéncete de que tus esfuerzos serán recompensados con creces.
Camino en el Bosque de bamboo en Japón
Reiki es un camino.
CAMINEMOS JUNTOS Y CREZCAMOS!
Meditación Tai-chi
Frutas, comer sanamente es purificación
Espero verte pronto. Mientras tanto cuídate, haz ejercicio.
Practica yoga, tai-chi. O simplemente camina por donde haya naturaleza, un parque, un jardín. Cuida tu cuerpo, tu mente y tu espíritu. Aliméntate sanamente. Bebe suero (limón, miel de abeja, bicarbonato y una pizca de sal de mar, todo al gusto). Duerme lo suficiente. Sonríe a la vida.
Repite mientras respiras conscientemente: Inspirando tranquilizo mi cuerpo, Espirando sonrío. Vivo el momento presente, sabiendo que es un momento bello.
Si no estamos alegres y en paz ahora mismo, ¿Cuándo vamos a estarlo?
Paseo en bicicleta, ejercicio en el parque
…Lo principal es que te ames a tí mismo. Un abrazo y que Dios te bendiga.